Amazon compra Bee, startup de wearables con IA que escucha y aprende del usuario en tiempo real

Amazon ha confirmado la adquisición de Bee, una startup dedicada a los wearables impulsados por inteligencia artificial (IA), cuya tecnología permitirá al gigante del comercio electrónico “escuchar y seguir” a los usuarios de manera literal. Esta operación representa para la empresa de Jeff Bezos una nueva herramienta en su competencia con rivales como OpenAI, Meta y Google, aunque también ha suscitado preocupaciones sobre la privacidad.

El anuncio fue realizado por María de Lourdes Zollo, CEO de Bee, a través de una publicación en LinkedIn. Posteriormente, Amazon corroboró la noticia al medio TechCrunch, aunque aclaró que el acuerdo aún no está cerrado. Se desconoce la cantidad que la empresa pagará por esta adquisición.

Visión de Bee

“Cuando comenzamos Bee, imaginamos un mundo donde la IA fuera verdaderamente personal, donde la tecnología comprendiera tu vida y la mejorara aprendiendo contigo. Lo que inició como un sueño con un equipo y una comunidad excepcionales ahora encuentra un nuevo hogar en Amazon\», expresó Zollo. \»No podríamos imaginar mejores socios para llevar una inteligencia artificial auténticamente personal y agencial a más clientes”.

Bee recaudó 7 millones de dólares el año pasado y recientemente ganó atención tras presentar Bee AI, una pulsera equipada con sistemas de IA que pueden escuchar, procesar y transcribir las conversaciones de los usuarios. La información recopilada se utiliza para generar resúmenes diarios, recordatorios, sugerencias y listas de tareas, todo gestionable desde una aplicación disponible para iPhone y Apple Watch. Además, el dispositivo puede acceder a diversos contenidos almacenados en la nube, como contactos, fotografías y correos electrónicos, y ofrece soporte para más de 40 idiomas, incluido el español.

Características de Bee AI

Según la compañía, “Bee AI se mantiene en silencio, aprendiendo tus patrones, preferencias y relaciones con el tiempo, desarrollando una comprensión más profunda de tu mundo sin requerir tu atención”. A pesar de las dudas sobre su desempeño y las promesas que lo rodean, el dispositivo, presentado en el CES 2025 con un precio inicial de 49.99 dólares, representa una propuesta alineada con las necesidades actuales de Amazon, especialmente en el ámbito de la inteligencia artificial generativa.

Aunque Alexa ya es una vía relevante para conocer los hábitos de los usuarios y, en algunos casos, recolectar información útil para perfeccionar sus modelos de IA, la tecnología de Bee AI podría significar un avance considerable en la cantidad y calidad de los datos disponibles para entrenamiento. Sin embargo, esta posibilidad ha despertado inquietudes sobre la protección de la privacidad.

Las políticas actuales de Bee establecen que los usuarios pueden eliminar sus datos en cualquier momento y que las grabaciones de audio no se almacenan ni se utilizan para entrenar sus sistemas de IA. Sin embargo, la aplicación sí conserva ciertos datos extraídos por la inteligencia artificial para funcionar como asistente personal.

La empresa también ha afirmado que trabaja en mecanismos que permitirán a los usuarios establecer límites temáticos o geográficos, con la capacidad de pausar automáticamente el aprendizaje del dispositivo. Además, planea desarrollar modelos de IA que puedan operar directamente en el dispositivo vestible, lo que reduciría los riesgos asociados al almacenamiento en la nube. A pesar de estas medidas, se desconoce si tales políticas se mantendrán tras la integración de Bee con Amazon.

Ante las preocupaciones, un portavoz de Amazon declaró a The Verge: “Desde nuestra fundación [como empresa] hemos manejado con responsabilidad los datos de nuestros clientes y nunca hemos vendido su información personal a terceros. Diseñamos nuestros productos para proteger su privacidad y seguridad, y para que tengan el control de su experiencia; este enfoque, por supuesto, se aplica a Bee”.