Olvida el texto y las voces: llegan los agentes de IA en video

La startup británica Synthesia, reconocida en el ámbito de los videos generados por inteligencia artificial, ha lanzado recientemente la versión más avanzada de su plataforma. Synthesia 3.0 promete transformar la experiencia de visualización de videos, permitiendo a los espectadores interactuar con el contenido en tiempo real, en lugar de ser meros receptores de información pregrabada.

Novedades en Video Agents

En versiones anteriores, Synthesia utilizaba modelos de inteligencia artificial para crear \»humanos digitales\» que podían pronunciar textos en video con gran realismo. Con el lanzamiento de Synthesia 3.0, se han introducido los Video Agents, considerados como \»el primer paso hacia una conversación bidireccional en video\». Esta innovadora tecnología permite la creación de videos interactivos mediante personajes virtuales que pueden \’dialogar\’ con el usuario, escuchar sus solicitudes y responder a sus preguntas.

Synthesia busca ofrecer estos \»agentes\» a las empresas, que podrán entrenarlos con información contextual para automatizar y escalar procesos repetitivos, como la selección de personal, la formación profesional, las evaluaciones de empleados, las presentaciones a clientes y los tutoriales de productos y servicios. Además, estos agentes de video tendrán la capacidad de recopilar datos en tiempo real y enviarlos a los sistemas internos de las organizaciones.

La experiencia del usuario se ve enriquecida por los nuevos avatares Express-2, que presentan características realistas, gestos naturales y sincronización labial. Estos avatares son personalizables en su apariencia y pueden replicar la voz (tono, ritmo y acento) del \»modelo\» humano en el que se basan, además de comunicarse en más de cien idiomas diferentes.

Los números de Synthesia

Fundada en 2017 y con sede en Londres, Synthesia se ha consolidado como una de las principales empresas de inteligencia artificial en el Reino Unido, con una valoración de 2,100 millones de dólares. Entre sus inversores destacan Google, DeepMind (la división de inteligencia artificial de Alphabet), Nvidia y el fondo de capital de riesgo Accel, conocido por ser uno de los primeros financiadores de Facebook.

La mayoría de los ingresos de Synthesia provienen de mercados no europeos, especialmente de Estados Unidos. \»El 90% de nuestro capital proviene de inversores estadounidenses\», afirmó Steffen Tjerrild, cofundador y director de operaciones de Synthesia. Los fondos de capital de riesgo de EE. UU. son predominantes en Europa, y los mercados de capitales son ahora más globales que hace una década.

Más de la mitad de las empresas de la lista Fortune 100 utilizan el software de Synthesia. Entre sus clientes se encuentran Zoom, Heineken y Microsoft, mientras que sus competidores incluyen a HeyGen y Touchcast, así como a gigantes tecnológicos como Alphabet, Meta y OpenAI, que recientemente alcanzó una valoración de 500,000 millones de dólares.

Entre la competencia estadounidense y la regulación europea

En términos de costos, la comparación con la competencia estadounidense resulta desfavorable, lo que ha llevado a Synthesia a enfocarse en un nicho específico. Alexandru Voica, responsable de asuntos institucionales, comentó que \»las grandes empresas tecnológicas tienen millones de productos, y a veces les resulta complicado competir en todos los frentes. Nosotros nos hemos centrado en lo que queremos: competir en el ámbito de los videos generados por inteligencia artificial para empresas. La plataforma que estamos desarrollando apoya a las empresas en diversos procesos laborales\».

Las startups europeas de inteligencia artificial, en comparación con sus contrapartes en América y China, enfrentan regulaciones más estrictas y una mayor atención a las implicaciones éticas de esta tecnología. Synthesia fue la primera empresa en su sector en obtener, hace un año, la certificación ISO/IEC 42001, que establece normas internacionales para la gestión responsable de sistemas de inteligencia artificial, similar a la normativa de la Ley de Inteligencia Artificial de la Unión Europea.