Si tu iPhone te distrae, prueba este truco de escala de grises

Es innegable que los teléfonos móviles son herramientas valiosas cuando estamos fuera de casa. Consultar direcciones, ver fotos, escuchar música, enviar mensajes a quienes hemos quedado o simplemente desplazarnos por las redes sociales mientras esperamos el autobús son actividades que resultan muy convenientes.

Sin embargo, el verdadero desafío con los teléfonos surge cuando estamos en casa. Este es el espacio donde preferiríamos dedicar tiempo a leer un libro, practicar un instrumento musical o cuidar del jardín. Sin embargo, realizar estas actividades se convierte en una tarea complicada, casi imposible, cuando el teléfono se presenta como una fuente de distracción tan atractiva.

Transforma tu teléfono en una herramienta menos atractiva

Una estrategia que puede ser de gran ayuda es hacer que tu teléfono sea deliberadamente aburrido. Cuando se discute sobre cómo combatir la adicción a los smartphones, un consejo común es activar la escala de grises en el dispositivo. No obstante, el inconveniente es que tener el teléfono en blanco, negro y gris de forma constante puede disminuir su utilidad en momentos en que realmente lo necesitas.

Por esta razón, he implementado una automatización que cambia mi teléfono a escala de grises al llegar a casa y lo regresa a color al salir. Esto me permite disfrutar de lo mejor de ambos mundos: un dispositivo completamente funcional cuando estoy fuera y uno que resulta menos distractor en mi hogar. Además, al utilizar los Atajos de Apple, no es necesario descargar ni instalar aplicaciones adicionales, ni siquiera tengo que presionar un botón para que funcione.

Configuración de los atajos

Para comenzar, abre la aplicación Atajos en tu iPhone. Crearemos dos atajos: uno para activar la escala de grises al llegar a casa y otro para desactivarla al salir. Es fundamental nombrar ambos atajos de manera adecuada para facilitar su identificación.